Para todos es sabido, que el fútbol como deporte e institución mueve a las masas. Debido a esto, no resulta extraño en señalar que este ha sido un utilizado por los distintos sectores políticos de Chile.
Lo anterior se remonta a la década de 1930, época en donde el fútbol provocaba el interés masivo de la sociedad. En donde Colo-Colo, se transformaría en la presa predilecta dé los políticos, dado a su éxito y a su ser un club identificado con el pueblo y la chilenidad. Lo que llevaría a que en esa misma década se comenzará la tradición en la cual el presidente de la república se transformaría en presidente honorífico de dicha institución.
Con lo anterior también cabe mencionar la construcción del estadio nacional entre 1937 y 1938, bajo el principal (y quizás único) pretexto deportivo de la época como lo puede ser su utilización para los grandes eventos futboleros de la época. Al mismo tiempo que el gobierno impulsaba la formación de diferentes clubes de barrio.
Con el gobierno de Jorge Alessandri, se utilizará el mundial de 1962 como una manera de dejar atrás la tragedia que había afectado a chile solamente 2 años atrás como lo fue el terremoto de Valdivia. Para aquello se dispuso convenientemente a la reconstrucción de las ciudades de Santiago, Viña del Mar, Arica y Rancagua, quienes eran las sedes de dicho mundial.
Para el año 1973 Colo Colo , el equipo popular, llega a la final de la copa Libertadores, un hecho inédito para los equipos chilenos de la época, él apoyaba la hinchada y de la población en general era algo transversal en todo el país. Como dijo Caszely (como se citó en Gómez, 2009), “Colo Colo unía al país: los hinchas llegaron en familia, el estadio era una fiesta”.
Situación que contrastaba con los tiempos difíciles que se Vivían para la época. Con una crisis económica y una polarización radical en el ámbito político-social. El único suspiro a este tenso ambiente consistía en los triunfos del equipo popular ya sea en el campeonato nacional o en la Libertadores.
Frente a ello los triunfos de Colo Colo se convirtieron en un alivio para el entonces presidente Salvador Allende, en donde este comenzaría un acercamiento al equipo popular invitándole varias veces al palacio de gobierno y como cuenta el Dt de la época Luis Álamos, en donde antes de los importantes partidos el recibía la llamada del presidente en donde este le decía “ojalá que ganen, para mantener unido al país”(El Mostrador,2013)
“De esta manera, se establece que el fútbol, en este caso representado por Colo Colo, forjó un vínculo especial con el poder político, representado por el Presidente Allende, en un contexto político-social bastante convulsionado por la crisis económica y política que vivía el país” (Jerez,2018,22).
Con la pérdida de la final comenzará a orquestar el golpe militar con el “tanquetazo”, para luego vivir un periodo de calma antes de la tormenta, en donde el fútbol sigue siendo el hito de unión nacional al afrontar las clasificatorias para el mundial de 1974, en donde la selección le ganaría al combinado del Perú para ir a jugar el repechaje frente a la Unión Soviética.
Con la llegada del golpe y dictadura militar el fútbol seguiría siendo una herramienta en la política. Con el partido de vuelta del repechaje, jugado en chile el día 21 de septiembre, en donde la selección de la Unión Soviética decide no venir a jugarlo debido a las graves diferencias políticas. La dictadura no dejó pasar esta oportunidad para mostrar su poderío en que alguna vez fue un aliado ideológico de Chile. Se elaboró un montaje en donde se hizo “jugar” a la selección en el estadio nacional, que es esos días era centro de tortura por parte de la dictadura. El montaje consistía en fotografiar el gol de Chamaco Valdés le propinaba a la selección Soviética, en un arco vacío, lo que calificaría el mismo protagonista del gol como su vergüenza más grande. Con ello se alzaba una vez más el poderío de la dictadura militar frente a los marxistas.
Tras el partido fantasma, la dictadura seguiría adentrándose en el fútbol chileno, influyendo en las elecciones presidenciales de la Asociación Central de Fútbol, lo que sería la ANFP de aquella época, al instaurar como presidente al comandante de carabineros Eduardo Gordon Cañas. Tras la ACF la dictadura seguiría influyendo en las directivas de los equipos más grandes Colo Colo, Universidad Católica Y la Universidad de Chile en donde esta última se separaría de forma permanente con la institución educativa.
Con la llegada del plebiscito del 1988. El jugador Carlos Caszely vuelve a la vida pública tras su retiro en 1985, que de por si fue polémico y político. Para Caszely esta no sería la primera vez que se pronunciaba en la política, ya lo había hecho en el 73, al apoyar a los candidatos Comunistas en las elecciones de ese año. Y al no dar su mano cuando Pinochet fue a despedir al seleccionado chileno rumbo al mundial del 74. Esto debido que tras llegar se había enterado que su madre había sido detenida y torturada por la dictadura. Hecho que reflotaron en la campaña del No como una forma de mostrar los horrores que habían ocurrido en el régimen.
Volviendo a su despedida en el estadio nacional con 90 mil hinchas, en donde abundaban las pancartas comunistas. Por lo cual la dictadura prohibió su transmisión por la televisión, pero no así por radio en donde se podía oír a los cánticos de la hinchada ! Y va a caer! ! Y va a caer!, haciendo alusión a la dictadura convirtiéndose así en uno de los actos políticos contra la dictadura más potentes
Por último cabe mencionar la utilización de la imagen publican de unos de los máximos artilleros del combinado nacional como lo fue Iván “BamBam” Zamorano, como rostro del nuevo sistema de transporte que reemplaza las antiguas micros amarillas, el Transantiago. El rol de Iván era de explicar a la población el cambio radical del sistema de transporte y de como este iba a funcionar, esperando a su vez un rostro que inspirara confianza con que el cambio de sistema iba a salir viento en popa. Sin embargo, tras la fallida implementación del sistema el rostro que alguna vez inspiró confianza en el sistema se transformó en el blanco de las críticas, lo que lo llevó a la pérdida de credibilidad de su persona y a su desaparición de la vida pública por algunos años.
Referencias
Prensafubol . (25 de Octubre 2019). Fútbol y política de la mano: De Colo Colo ’73 al no saludo de Bielsa. Obtenido de https://www.prensafutbol.cl/316210-futbol-y-politica-cuando-se-rompen-las-barreras-del-deporte-bielsa-colo-colo/
ElMostrador. (9 de Septiembre 2013). Colo Colo 73: el equipo que pudo atrasar el golpe. Obtenido de https://www.elmostrador.cl/cultura/2013/09/09/colocolo-73-el-partido-que-pudo-atrasar-el-golpe/
Raul Jerez Vergada. (17 de Julio 2018). Fútbol como objeto de deseo del poder político en Chile Los casos del Colo Colo 73 y Carlos Caszely. Universidad Andres Bello. Obtenido de http://repositorio.unab.cl/xmlui/bitstream/handle/ria/10431/a128175_Jerez_R_Futbol_como_objeto_de_deseo_2018_tesis.pdf?sequence=1&isAllowed=y